¿Usted se ha imaginado a un líder de una comunidad evangélica agrediendo a su expareja porque esta supuestamente ya consiguió novio?

Aunque parezca ináudito, así ocurrió, y fue aquí en Barranquilla: El líder religioso le propinó una golpiza a su exesposa en la mañana del miércoles, según lo denunció la afectada. 

Adriana Marcela Eljach Polo, tiene 27 años, llegó en un taxi a Medicina Legal apoyada de una amiga porque le era difícil caminar por los golpes que había recibido en todo su cuerpo. Ingresó a las instalaciones para ser valorada por un médico luego de interponer la denuncia contra su exesposo, un líder evangélico de una reconocida iglesia cristiana en el norte de Barranquilla, al que ella identificó como Iván Castro Vega. 

A los pocos minutos salió sobándose los brazos enseñando los moretones que le habían quedado por la golpiza que le habían propinado en la mañana del miércoles. 

La mujer afectada contó los momentos de terror que vivió con la golpiza en su lugar de trabajo por el padre de sus dos hijos.

"Ayer miércoles a las 10 y 30 de la mañana Iván entró a mi oficina, cerró la puerta y no me dejaba salir. Enseguida comenzó a decirme que ya tenía novio, y que era menor que él. "Ahora te gustan los menores que yo", eso fue lo que me dijo", contó la mujer. 

Ella tratando de calmar los ánimos, quiso cambiarle el tema. 

"Le dije que los niños no tenían merienda, pero me respondió: "Dile a tu novio, a tu puyón que te lo dé" y me haló el cabello", relató.

Seguidamente comenzó a pegarle patadas y puños por todo el cuerpo. 

"Me dejó varios hematomas en ambos brazos, también en la pierna izquierda y un fuerte dolor en el abdomen. En Medicina Legal me dieron 16 días de incapacidad por las lesiones", manifestó la joven mujer. 

Por los constantes problemas la pareja de esposos dejaron su relación a un lado y hace un año se divorciaron. 

"Nosotros asistíamos a la iglesia de sus padres que son pastores, él es líder evangélico, pero nos divorciamos porque ya tenía otra mujer", dijo Adriana Marcela. 

Luego del brutal ataque la mujer se encerró en el baño para que no la siguiera golpeando. "Me encerré en el baño y me comenzó a gritar diciéndome que donde estuviera me iba a matar".

La joven afectada se acercó a las autoridades departamentales que brindan ayuda y apoyo a mujeres víctimas para que capturen al agresor. 

"Que lo capturen y pagué por lo que me hizo. No es la primera vez que me pega pero nunca lo había denunciado", finalizó la joven.

Este problema de maltrato contra la mujer se ha vuelto repetitivo.

Los hombres parecieran no soportar que su expareja tenga una nueva relación porque les da un ataque de celos.

Un caso similar ocurrió hace varios días en el corregimiento La Peña en Sabanalarga donde una mujer de 36 años fue brutalmente agredida por su excompañero sentimental. El hombre cegado por los celos le extrajo los dientes con una pinza y le ocasionó varios golpes en su cuerpo.